He tenido un poco olvidado el blog y el potingueo. Una pequeña lesión me ha tenido un poco remolona, eso sí he aprovechado para coser y coser... Pero eso es para otra entrada.
Me he puesto a ello con esta crema para tratar las manchas. A mi madre le han salido unas manchas en el brazo y eso que al sol lo huye cual vampiro, pero la edad no perdona. Le pidió consejo al médico porque además tiene descamaciones y "eso es de la edad" fue la única contestación que le díó. Así que le he hecho esta crema, que no será milagrosa pero al menos tendrá la zona hidratada y veremos como resulta.
La fase oleosa es un combinación de tres aceites:
Aceite de cártamo, con fabulosas propiedades reparadoras y nutriente, además es un potente antioxidante.
Aceite de chaulmoogra, calma la piel irritada y dañada, evitando la descamación. Ayuda a igualar la pigmentación evitando las manchas, además de ser antibacterial.
Aceite de ricino, con probadas propiedades antimanchas, calmante y reparador.
La fase oleosa es un hidrolato de lavanda, con características similares a los aceites: calma y repara.
Para completar y ayudar con la despigmentación de las manchas le he añadido un extracto de Boerhavia diffusa india. Esta planta, en concreto su raíz, ayuda a luchar contra las manchas porque reduce la actividad de la tirosinasa, una enzima clave en la sintesis de la melanina, reduciendo su acumulación en la epidermis.
Otro activo que he utilizado es el activo AHA, de ácidos de frutas. Contiene diferentes ácidos como el láctico, glicólico, cítrico, málico y tartárico. Es un activo queratolítico, que ayuda a la regenarión celular, mejora la hidratación y la elasticidad de la piel.
Además añadí un extracto que hice de regaliz, con propiedades antimanchas.
El aroma lo aportaron los aceites esenciales que también tiene esa característica: benjuí, incienso y ciprés.
Ahora toca esperar a ver si da resultado. Se me ha olvidado hacer una foto de como tenía la mancha en un principio y comparar. Espero que no se me olvide esta semana.