Con
un suave aroma a canela y anís, que lo adorna, despierta los sentidos. Se ha comprobado que la canela tiene efectos relajantes y se utiliza desde
hace mucho tiempo para eliminar el estrés y como potente relajante natural. Y es
conocida su fama como afrodisiaco.
Los aceites utilizados le dan unas propiedades
suavizantes y emolientes que hidratan y
nutren nuestra piel, con acción antiarrugas y antiestrías, en especial el
aceite de oliva y la manteca de cacao.
El aceite de palma además actúa como antioxidante y
ayuda a las pieles con eccemas. Junto con el aceite de maíz le da un alto
acondicionado al jabón, limpian suavemente y recomponen la capa lipídica de la
piel.
A la limpieza de impurezas de la piel también
contribuye el aceite de ricino que es muy beneficioso para las pieles secas.
La canela es una de las especias que mayor capacidad antioxidante tiene debido a su elevada
concentración en compuestos fenólicos, similares a los contenidos en el vino
tinto, y la presencia de flavonoides en su composición, semejantes a los
contenidos en los arándanos.
Se ha comprobado que el
aceite de canela tiene fuertes efectos inhibitorios del crecimiento de hongos y
además, se está intentando confirmar su capacidad antibacteriana.
En la composición de la
canela destaca la presencia de vitamina
C, vitamina B1, hierro, potasio, calcio y fósforo, por lo que, aunque se consume
en escasas cantidades debido a su intenso sabor, nos brinda un conjunto de
vitaminas y minerales esenciales para nuestro cuerpo.
Incluso,
su poder antiinflamatorio
permite que el extracto de canela se utilice en cremas para calmar dolores de
articulaciones o molestias musculares. Además, se ha utilizado en enfermedades
respiratorias para aliviar la congestión, la tos y los síntomas de resfriado.
Como resultado un estupendo jabón para la piel, con
un suave aroma que nos deja la piel limpia, suave e hidratada. Una joya en el
baño.